¡Qué ganas de abandonar el mundo cuando me hiero,
cuando tomo una mala decisión
cuando dejo el mundo entero!
Cuando recaigo y me muero
y quiero morir.
Qué ganas de no entender nada,
de sumergirse no sé a donde,
quién soy y de dónde vengo,
cómo empezar a entender lo que pasó
en mis vestidos de niña
en mis cuentos de infancia,
y ahora que la vida me saluda
cuando la flor de mis tiempos florece
cuando debiera sembrar y cosechar al tiempo
me malgasto en este arte
que me embruja el rostro
que me seca los dedos,
que deja huella muda en tantos espacios de otoño.
Yo no olvidaré la poesía,
ni los ojos de niña cuando miraba hacía mi mar
cuando lo abrazaba hacia mi pecho
mientras el viento me traía su mirada,
cuando lo recogía con mis manos
cuando sus olas mojaban la arena de mi alma.
Qué ganas de dramatizar esta vida,
qué ganas de inmolarse y sepultarse,
cuál es esta gana de inventar, de fantasear,
de crear,
cuál es esta gana que tengo de soñar,
dónde debiera irme
dónde debiera huir.
Qué hago de mí,
qué hago de mí,
¿Cuándo es que voy a despertar?
despertar entiendo como morir
ResponderEliminarmorir en lo que se encarga de mantenerte
siempre vivia, siempre equilibrada en el extenso caos
despertar y solo ver agua en vez de mar
despertar y solo sentir el aire
como eso que envenena.
aveces lo mejor es seguir soñando.
zandor x