Volvía a la mansión
Retornar no era agradable pero estabas moribundo y deseabas verme antes de morir
No podía negarme a tu pedido
Han pasado cinco años desde que partí de allí
Desde que llegue con una carta de mi madre en la que te solicitaba me protegieras
Me sentí a gusto entre tantos libros, rodeada de arte, de jardines y de esa niebla que se levantaba mágica dándole a todo el lugar un aire místico
Ah y nuestras largas charlas
Discutíamos sobre las motivaciones y las justificaciones de la vida y de la muerte; como de nuestras opiniones sobre maestros como Poe, Baudelaire y Nietzsche
Que bien que me sentía entonces
Hasta aquella noche en que me despertaron los alaridos estridentes de una mujer
Pude advertir desde mi ventanal que corría desesperada entre la niebla profiriendo en gritos angustioso _No diré nada, por favor, callaré, te lo juro
Mientras alguien le perseguía riendo a carcajadas, opacando su voz a siniestros latigazos que cortaban hasta niebla
De repente todo quedo en un silencio sepulcral donde solo podía sentir los latidos de mi corazón desbocado
Al despuntar el sol, baje apresurada al salón
Tú estabas en la biblioteca, entre apresurada y me recibiste con una enorme sonrisa mientras me decías:
–Has madrugado, me alegra así podrás ayudarme a traducir unos textos
Mientras me hablabas sonriente, me preguntaba, si todo había sido un sueño
No pude callarme:-Acaso, no escuchaste los gritos anoche
_Vaya ahora entiendo; has tenido una horrible pesadilla
_Pues ve, desayuna y tomate el día de descanso, pasea o cabalga y olvida las pesadillas, que solo son eso
Así pasamos algún tiempo más juntos hasta que debiste viajar a Londres por cinco días
Fue entonces cuando a la segunda noche de tu partida, estando en la biblioteca unos fuertes golpees en la puerta hicieron la pesadilla real
Un gendarme te buscaba
Le dije que estabas de viaje pero que a tu regreso te trasmitiría lo que vino a decirte
Dijo entonces que hacia dos días unos jóvenes que volvían de divertirse habían encontrado en un pozo abandonado al sur de tu propiedad el cadáver de una mujer irreconocible por los latigazos que se le habían propinado y con un tiro en la frente
Empalidecí de terror
El gendarme muy amable, me dijo que no dejara puertas o ventanas abiertas, que no abriera la puerta de noche a nadie ya que temían que algún psicópata anduviera suelto en la zona donde podía esconderse tranquilamente para cometer sus agresiones
Al día siguiente, junte mis cosas, pase por la delegación y regrese a casa
He llegado, la niebla cubre todo el lugar como aquella noche
Tengo aún el juego de llaves que me diste, entro, llego a tu alcoba, estas sentado leyendo, algo demacrado pero nada me dice que moribundo
Una mentira más entre las tantas que rodean tu vida
Tú me das tu mejor sonrisa y yo saco la bersa y te vuelo la cabeza… por mamá
Hasta nunca sádico y madita basura
Ah chingá!!!
ResponderEliminarSi que estuvo espléndido tu relato; no me esperaba ese final
Cuando creía que cometías el peor error de tu vida volviendo a la mansión, le das un giro violento e impresionante al relato dejándome con la boca abierta
Muy cierto aquello de que la venganza es fría ...
ajaja que bueno esta
ResponderEliminarganas tu, de una
Oh! nada de venganza, demonio; llámale simplemente " JUSTICIA "
ResponderEliminarAhora ya puedo deciros que es magnifico vuestro relato, que has avanzado mucho en narrativa, que me dejaste sumamente contento ya que siempre os dije que podíais dar más en este tipo de expresión donde dejamos el sentimiento y usamos la imaginación
ResponderEliminarPues bien mi Blue, me conocéis demasiado como para saber que voy a seguiros espoleando para que avancéis en esto, váis a ser lo que me propuse unos años atrás
De nuevo magistral miarma
Tijger