Murmullos antiguos, casi imperceptibles
En un lenguaje de viejas estrellas
El viaje sin fin, eterno, es aquel que siempre se empieza
Cuando todos los pasos son siempre el primero
Las estatuas, mis testigos de roca
Mas las mudas sentencias en losas de piedra
Y la mirada pétrea de quien todo lo ha visto
Me persiguen en sueños, en los caminos de vuelta
Ahí, donde me encuentro
Recorriendo ya el último tramo
Permaneciendo siempre en el mismo sitio
Tanto, pero tanto tiempo quieto
Que mis perseguidores me confunden
Me creen uno de ellos
Y con la mirada pétrea de quien no ha visto nada
Me alejo, en una noche de viento
Entre sentencias sin nombre
En la justicia del tiempo
Siendo observado por seres sin rostros
Ahí, en el muro de los lamentos
El rey de los desterrados
Antiguo oscuro y misterioso
ResponderEliminarcada vez me sorprenden mas tus escritos :)
Jó excelente chaval , cada poema es una fuente de imaginación
ResponderEliminarFelicitaciones
Impresionante poema, mientras te leía me recordaste mi primera visita a las catacumbas de Paris
ResponderEliminarEnergía y las miles de voces murmurando en aquellos pasillos, algunos clamando justicia, otros, venganza, otros piedad
Me desmaye en ese entonces... el lobo Hunter me tuvo que cargar a la salida
Más la segunda vez pude enfrentarlos, había aprendido a bloquearlos
Sigue adelante con tu poesía, es magnifica
Un beso, amor