Parte 1: El comienzo Lousiana, 1810 En un lejano valle, tierra de ganaderos, en una cabaña vivia una pareja de esposos que tenian una hija de 15 años llamada Eloisa, la cual se dedicaba a dar clases en la escuela del pueblo. Una noche de tormenta llegaron unos 3 hombres, venian de cazar bufalos en la tierra de la tribus Indias. Tocaron la puerta de la cabaña pidiendo alojamiento por esa noche, partirian al amanecer. El hombre de la cabaña vio en ellos unos hombres toscos y salvajes. Les permitio quedarse, pero en el granero. Los hombres aceptaron, pero por la puerta entreabierta vieron a la hija del hombre que era muy hermosa y se miraron en forma complice. Parte 2: Amargura Pasaban las horas de la noche, todos en la cabaña dormian. Un fuerte golpe en la puerta los despertó, luego siguieron voces y gritos de desesperación de sus padres. Dos disparos silenciaron con los gritos. Luego unos pasos subiendo por la escalera hasta hallarse frente a ella. Ella los vió abalanzarse, rompieron su ropa. Ella gritaba, rogaba para que no le hicieron daño, pero no la escuchaban. La sujetaron muy fuerte, separaron sus piernas y la violaron, la golpearon, cubrieron su cuerpo con sudor y sangre. Siguieron asi hasta saciarse. Luego la sacaron fuera de su casa para que viera como esta se consumia en llamas.
Parte 3: Huida Eloísa corrió y corrió por la oscuridad de la pradera. En un descuido habia logrado escaparse de estos hombres que harian de ella una prostituta de los cazadores de bufalos. Siguió corriendo hasta caer desmayada del cansancio sobre el polvo del desierto. Al despertar se vio frente a una fogata rodeada de personas extrañas, todos vestidos elegantemente. El hombre mayor le habló: eran europeos, venidos a America para iniciar una nueva vida. Eran perseguidos en Francia y no debian de volver. Ella les agradecio el haberla ayudado, pero les mintió al decirle lo que le paso. Allí conoció a Endora, una muchacha de su edad que tenia algo diferente a los demás, de quien se hizo muy amiga. Eloísa y esas personas viajaron por muchos lugares, por negocios, por diversión. Endora y Eloísa recorrian las tiendas de los pueblos, comprando los mas bonitos vestidos, joyas. Un dia que atravesaban el desierto, Eloísa los vió, sintió temor. Allí estaban ellos, los hombres que destruyeron su inocencia para siempre. Sintió miedo, quizó huir, pero Endora la contuvo. No hacia falta que le contara de esos hombres, ya sabia lo que le hicieron. Le prometio ayudarle a vengarse de ellos. Parte 4: Iniciación Era de noche, la luna brillaba en su esplendor en el cielo estrellado. Endora la despertó. En silencio se alejaron de la carreta. caminarion 20 minutos bajo la luz de la luna. Llegaron a un lugar rodeado de rocas como un coso. Endora colocó muchas velas encendidas formando un circulo alrededor de ellas. Se vistió con un vestido negro, collares y anillos en forma extraña. Le dijo que no temiera. No le haría daño. Eloisa se paro desnuda en medio del círculo de vela. Endora afuera del círculo empezó a rezar en voz baja. Las palabras eran extrañas, en otra lengua. Poco a poco su voz se fue haciendo mas alta. Estiró sus brazos al cielo, mirando a la luna grito mas fuerte. El viento se hizo mas fuerte, las nubes cubrieron el cielo. Solo la luna no fue cubierta por las nubes, como avída espectadora. Relámpagos y rayos, sonidos de ultratumba en el viento. Muchas sombras aparecieron murmurando una oracion. Empezaron a caminar alrededor de las velas. Eloísa no sentía temor, se sentía protegida por todos ellos. Endora penetro dentro del circulo. Su ojos se habian vuelto blancos. se acerco a ella, la abrazo muy fuerte. Beso su cuello y la mordió. Eloísa sintió mucho dolor, luego mucho frío, algo tibio caía por su cuello, hombros, senos. Se fue sintiendo débil hasta caer en los brazos de Endora. Vio las sombras detenidas dentro del cículo de velas, mirándola. Seguían rezando. Miro los ojos de Endora, le daban paz en su agonía. Eloísa se despedía de la vida agradeciendo por los maravillosos padres que tuvo, por haber conocido a Endora y haberla ayudado por mucho tiempo a olvidar lo que le paso. Endora coloco una copa en los labios de Eloísa y le pidio lo bebiera. Era la sangre de los padres adoptivos de ella. Eloísa lo hizo con las pocas fuerzas que tenía. Sintió como sus fuerzas volvian, el frio que sentia era cada vez mas agradable. No sentía que moría. Las sombras se detuvieron. Los relampagos eran contínuos. El viento soplo mas fuerte, mas y mas. De pronto las velas se apagaron y se encendieron. Las sombras habian desaparecido. Solo estaban Endora y una nueva Eloísa vestida de negro, con collares y anillos raros en los dedos. Había llegado la hora de la venganza.
Parte 5: Venganza De pronto se vieron volando lejos del lugar de la iniciacion. Eloísa ansiaba vengarse de ellos. No hacia falta buscarlos, podia sentir el olor de la sangre de los que la violaron. Llegaron a una cabaña en la pradera. Allí los vió. Cada uno estaba con su esposa e hijos. No aguantó más y entró por la ventana. Los hombres se despertaron por el ruido, y vieron a las dos mujeres, frente a ellos. Los niño lloraban de miedo. Antes que pudieran tomar su escopeta, Eloísa y Endora, rodearon a las esposas de los hombres, se acercaron rapido, y mordiendoles el cuello se lo rompieron. Los cuerpos cayeron ante los pies de los hombres. Dispararon mucha veces pero no les hacian daño. Endora se llevo a los niños a otra habitación. La sangre inocente era un manjar que no compartiría con nadie. Frente a frente, Eloísa y los tres hombres. Uno a uno fue matándolos lentamente. Les arranco los dedos, las manos, los brazos, la nariz, las orejas, los ojos, y asi fue despedazándo la vida de esos seres. De pronto se vio rodeada de ellos, ya sin sangre en sus cuerpos. toda se la habia bebido para calmar su inagotable sed de vengaza. Endora salió de la otra habitacion, de sus labios caía sangre. Amba se miraron y se rieron. Eloísa había cumplido su venganza y Endora había ganado a una compañera. Parte 6: Epílogo Endora y Eloísa, en la borda del barco, miraban el muelle de Orleans alejarse cada vez mas. Habían recorrido muchos pueblos por varios años, saciado su sed de sangre cada noche. Ahora debían partir al viejo mundo. A vengarse de los que persiguieron a Endora y su familia. - Eloísa ¿No extrañarás esta tierra? - preguntó Endora - No. Cuando volvamos de Europa iré a Mexico a buscar una mujer rubia llamada La güera Rodriguez que es como nosotras. Luego iré muy al sur, donde se libran batallas para liberarse de la corona española. Allí habrá mas sangre por beber. Por ahora mira a esa mujer obesa, siempre es bueno comer algo durante viaje - respondió para luego lanzarse sobre la mujer y beber de su sangre.
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martes, 14 de junio de 2011
Eloísa
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Ohhh ahora si que me quede con la boca abierta , vampiras y hechiceras , muy buena mezcla
ResponderEliminaranda que el cuento venia interesante, pero tuviste que meter a los vampiros... aun así el cuento esta muy bueno.
ResponderEliminarsaludos
Yo tambien estoy boquiabierto jaja. Me tomo hacerlo y rehacerlo pero ya esta. Gracias por leerme.
ResponderEliminarPues fue un buen relato , con un giro interesante en los acontecimientos
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