Cuesta creen en las palabras
Que se prostituyen por monedas
En los poemas mercenarios
Asesinos en una sala de espera
Contemplo con ojos de ciego
El cielo plomizo que nos cubre
Bajo mis pies, el temblor que sacude
Los cimientos mismos del mundo
Y se acusan unos a otros como niños
Que rompieron un jarrón mientras jugaban
Triste martirio del que es nada
Mas que si mismo, y eso no es mucho…
Pero los ojos miran y leen
Lo que los labios ocultan
En esa boca que devora penumbras
Con dientes quebrados, quebrados.
Pupilas fugases, solo será un momento
Y luego veras que ya no sientes
Olvídate de lo que te olvidaste
La nada y su paciencia tiene un límite
Y es así como abrazo lo que he sido
Y me despido de lo que seré
Bajo, muy lento, por la escalera
Donde me espera el, triste destino.
el rey de los desterrados
¿Acaso os habéis dado por vencido?
ResponderEliminarLa nada es nada y la paciencia una boñiga cuando ella nos lleva por el camino de adiós a lo que hemos sido y amamos ser
Nada esta escrito, salvo el día de nuestra muerte y el destino lo hacemos nosotros con valentía o con cobardía
Si estas cansado talvez debas sentarte a descansar pero nunca desistir
Jo no te me dejes ganar ni por la pena ni por la decepción
ResponderEliminarte la devuelvo creo que te hace falta
Un besito amor